La crisis es un momento de crecimiento interno, donde la empresa se fortalece y se nutre para dar frutos en el futuro. Esto significa que es momento de regar y plantar, no de cosechar, aunque algunas personas piensen que el éxito ocurre solo en el momento de la cosecha. Esta es una visión limitada del éxito, es una visión que entiende el éxito como un ascensor, no como una escalera.
Si para ti el éxito se basa solo en obtener ganancias, este es el camino que te llevará a caer, pero si el éxito se basa en una cadena de valores, propósitos y entrega, entonces puedes tener éxito siempre. Ahora, si aún deseas que ese éxito te dé frutos financieros, es importante entender cómo tu empresa puede fortalecerse para dar frutos en el momento adecuado.
Mantener una mentalidad enfocada
Ser resiliente es mantener el enfoque en medio del caos y el sufrimiento. Imagino que para ti, no se trata solo de una ganancia financiera, sino del sustento de tu familia, tus empleados y el bienestar de las personas que amas, además de ser motivo de orgullo o vergüenza personal. Hay muchas cosas en juego que pueden hacerte sentir miedo, pero ese miedo debe ser un detonante para mejorar, no para paralizarte. Es esencial mantener una actitud positiva y resiliente. La crisis trae desafíos, pero también puede crear oportunidades para innovar y adaptarse, al fin y al cabo, nada enseña más que las luchas.
Identificar oportunidades
Emprender es ofrecer algo que resuelva el problema de otras personas, ¡la crisis es el momento en que las personas tienen más problemas por resolver! Analiza los cambios que la crisis ha traído al mercado e identifica nichos o sectores que están creciendo o se están adaptando bien. Habla con tu público sobre el momento actual y descubre cuáles son los dolores que necesitan resolución y ve cómo puedes colaborar con ellos.
Ser flexible y adaptable
No seas ese empresario terco que insiste en el error, está dispuesto a ajustar tu plan de negocio. Busca una manera de hacer que tus procesos sean eficientes con menos costos y busca innovaciones que puedan mejorar el desempeño de tu empresa, utiliza las plataformas que tienes a tu disposición. Ten contacto con otros profesionales, habla sobre negocios, participa en grupos para mantenerte actualizado sobre el mercado y explorar nuevas posibilidades.
Fortalecer la relación con los clientes
Esto es de suma importancia para el futuro de la empresa, mantener una buena relación con los clientes, incluso si no es haciendo ventas directamente. Recuerda que toda crisis tiene una fecha de caducidad, se están construyendo nuevas empresas, se están desarrollando nuevos productos y mantener el contacto con los clientes hará que recuerden tu empresa cuando tengan la capacidad de comprar nuevamente.
Desarrollar tus habilidades
Utiliza el tiempo durante la crisis para aprender cosas nuevas y mejorar tus habilidades. Esto puede hacerte más valioso en el mercado laboral o en los negocios en algún momento. Busca habilidades que serán tu diferencial en el futuro, esto reducirá el riesgo competitivo.
Mantener el control financiero
No uses la crisis como una excusa para justificar tu desorganización financiera, gestiona cuidadosamente tus finanzas y mantente al tanto de tu situación financiera. Cuando hay crisis, las personas pueden perder el control, de manera racional y clara, busca resolver este problema, enfrentando todas las deudas, errores y desafíos.